Mabel Cartagena se quitó prótesis por sentirse “vulgar” y confesó el gran miedo que sintió por tenerlas

Mabel Cartagena, una de las presentadoras más queridas de la televisión colombiana, alcanzó gran notoriedad gracias a su paso por programas como El Lavadero, Muy buenos días, Día a Día y También caerás, entre otros.

A lo largo de su carrera, Mabel se destacó por su carisma y profesionalismo, pero recientemente sorprendió a sus seguidores al revelar una decisión personal que había tomado: la de retirarse las prótesis mamarias que se había colocado hace años.

La decisión de Mabel de someterse a esta cirugía estética no fue impulsada por belleza, sino por una serie de factores que la llevaron a replantearse su bienestar.

La presentadora explicó que comenzó a escuchar sobre el síndrome de Asia, una condición que afecta a algunas mujeres después de someterse a una cirugía de implantes mamarios.

Este síndrome puede generar una serie de síntomas físicos, mentales y hormonales debido al rechazo del cuerpo hacia los implantes.

Mabel mencionó que al principio no le dio mucha importancia, pero durante la pandemia, mientras se encontraba en aislamiento, empezó a investigar más sobre el tema.

“En plena pandemia empiezo a escuchar sobre el síndrome de Asia y dije: ‘No, yo no quiero pasar por esto’. Llevo 19 años con prótesis, ya me las ‘parrandié‘”, confesó la presentadora en una charla con La Kalle.

Además de los riesgos para su salud, Mabel admitió que, con el paso del tiempo, sus prótesis dejaron de sentirse como una parte natural de su cuerpo.

Aseguró que llegó a sentirse incómoda con su imagen, incluso vulgar. “Me sentía vulgar. De pronto la gente no lo veía así, pero yo, al mirarme al espejo, decía: ‘No me gusta, el escote se ve muy llamativo’”, compartió con sus seguidores.

En sus palabras, su físico ya no reflejaba la mujer en la que se estaba convirtiendo, y el hecho de querer verse sexy dejó de ser una prioridad para ella.

En un momento crucial de su vida, Mabel ya no se sentía identificada con la imagen que proyectaban sus prótesis. “Ya era mamá, y esa etapa en la que quería verme sexy ya la había quemado. Ahora estoy en otro rol, ya no quiero eso, me cansé”, expresó.

La necesidad de encontrar un equilibrio con su cuerpo y su nueva etapa en la vida la llevó a tomar la decisión de retirarse las prótesis.

El miedo al síndrome de Asia, que puede provocar síntomas como fatiga crónica, dolor en las articulaciones y cambios hormonales, fue el último empujón que Mabel necesitaba.

“Yo no soy experta, pero entendí que mi cuerpo podría rechazar las prótesis y, si algo negativo sucedía, no quería estar pasando por esa situación”, explicó.

Así, en octubre de 2020, durante el confinamiento, Mabel se sometió a la cirugía para retirar las prótesis y expresó sentirse muy bien con su nueva imagen. “Me siento muy chévere”, afirmó con una sonrisa en su rostro.

Esta valiente decisión de Mabel Cartagena ha sido un ejemplo de cómo las mujeres pueden tomar el control de su salud y bienestar, priorizando su paz interior por encima de las expectativas externas.