Tadej Pogacar arremetió contra uno de sus rivales en el Tour de Francia: “No sé que intentó”

En la sexta etapa de hoy del Tour de Francia, el esloveno Tadej Pogacar, cedió el ‘maillot amarillo’ de líder por un segundo contra uno de sus rivales, el neerlandés Mathieu van der Poel, algo que consideró positivo para ahorrar fuerzas de cara al futuro.

Por otro lado, Pogacar se mostró algo molesto con el equipo de Jonas Vingegaard, ya vio que su objetivo era ponerle presión con la camiseta amarilla y obligarlo a cumplir labores defensivas.

“Visma intentó hacer, no sé qué (...), se lanzaron con fuerza, así que simplemente los seguimos. Se acercaron en los dos últimos tramos, yendo a toda velocidad”, agregó.

Por otro lado, Tadej no desaprovechó la oportunidad para arremeter contra uno de sus mayores rivales en este Tour de Francia. “Quizás sabían que Mathieu van der Poel estaba sufriendo y perdiendo tiempo en cabeza. Quizás Visma quería darme el maillot amarillo hoy, pero Mathieu lo tiene por un segundo, así que le doy mi felicitación”, señaló el esloveno disgustado por la estrategia.

“Visma marcó un ritmo altísimo en la penúltima subida, y en la última Matteo Jorgenson se lanzó al esprint. Es un poco inútil, porque ya no era un esprint para un top 10. Probablemente pensó que podría ganar uno o dos segundos”, aseveró.

Asimismo, explicó cómo se trabajó en la etapa de hoy. “Primero endurecimos la carrera y luego pensamos si íbamos por la etapa o no y preferimos no gastar balas. Mantuvimos nuestro ritmo y en el tramo final el Visma ha acelerado, quizá porque no querían que yo perdiera el liderazgo”, señaló el corredor de UAE.

Por último dejó en claro que aún no le interesa ponerse como líder.“ No me importa tener el 'maillot amarillo’, pero está claro que el objetivo es ahorrar el máximo de fuerzas posible. Mañana llega otro buen final para mí. Pero necesitamos las piernas para la segunda y la tercera semana".

Así se correrá la séptima ronda del Tour de France.

La séptima etapa del Tour de Francia, el viernes con salida en Saint-Malo, concluirá en el Muro de Bretaña, llamado el Alpe d’Huez bretón, que se ha impuesto en el último cuarto de siglo como uno de los clásicos de la ‘Grande Boucle’.

Con 197 kilómetros de recorrido, y 2.450 m de desnivel positivo, la etapa concluirá con un circuito que llevará a los corredores a escalar en dos ocasiones la famosa subida, la primera vez a 15 kilómetros para el final y la segunda en la llegada.

Será la quinta ocasión en que el Tour concluirá en el Muro de Bretaña, después de las victorias de Cadel Evans en 2011, Alexis Vuillermoz en 2015, Dan Martin en 2018 y Mathieu van der Poel en 2021.