Dorival Júnior, técnico de Brasil, reveló parte de la táctica que utilizará en la partido contra Venezuela por las Eliminatorias al Mundial del 2026

La Eliminatorias sudamericanas para el Mundial de Estados Unidos, Canadá y México del 2026 regresan este jueves, en el cual el primer partido de la undécima jornada de la clasificación será el encuentro entre Brasil y Venezuela, en el estadio Monumental de Maturín, Venezuela.

Previo a este duelo que comenzará a las 5:00 de la tarde hora local (4:00 p.m. de Colombia), el técnico de Brasil, Dorival Júnior, habló de la exigencia que tendrá este compromiso.

“No piensen que tendremos un partido fácil. Olvídense de lo que fueron Venezuela o Bolivia en el pasado reciente. Actualmente, el orden mundial ha cambiado mucho”, expresó en la comparecencia de prensa previo al juego.

“El fútbol sudamericano ha crecido mucho en términos generales. Si tomamos la mayoría de las alineaciones de las selecciones, veremos jugadores que actúan en equipos de todo el mundo, un factor que hace poco no sucedía”, agregó.

También habló de que los partido son cada vez más parejos.

“Las selecciones de élite no tenían mucho espacio de crecimiento, mientras que los equipos de abajo empezaron a ganar un espacio interesante e importante. Esto ha igualado mucho y ha hecho que los partidos sean cada vez más disputados”, puntualizó.

Luego complementó que “existe una confianza muy grande a raíz de lo que estamos viendo en los entrenamientos y que, espero, podamos repetir en el campo”.

Comentó la mejoría que viene ganando el equipo en las últimas jornadas: “Nuestra situación no era completamente favorable, venimos de una posición de atrás (...) Ganamos un poco más en el sentido de tener una mejor estructura del equipo”.

Respecto al equipo titular dijo que será al mismo que consiguió el triunfo contra Perú en el último partido, exceptuando a Rodrygo, quien es baja por lesión: Ederson ; Vanderson, Marquinhos, Gabriel Magalhães y Abner; Bruno Guimarães, Gerson y Raphinha; Savinho, Vinicius Jr. e Igor Jesus.