¿Clima difícil para James Rodríguez? El 10 ya siente en Barranquilla las consecuencias de su fallido paso al Atlético Junior

James Rodríguez sabe que el hinchas del Atlético Junior no olvida. Por eso, el jugador seguramente está preparado para escuchar algunos pitos el martes cuando la Selección Colombia enfrenta a su similar de Paraguay, por la eliminatoria suramericana.

¿La razón? Su fallido paso al Atlético Junior para este año, una noticia que fue la bomba del fútbol colombiano cuando se supo de las conversaciones entre jugador y equipo, pero los diálogos no llegaron a buen puerto porque James prefirió irse al León de México.

La posible llegada del volante de la Selección al onceno barranquillero, acaparó páginas de los diarios y tuvo espacio grande en los programas deportivos del país. Hasta hubo un cara a cara entre James y el dueño del Junior, Fuad Char, reunión que se llevó a cabo en Medellín a comienzos de año.

Pero mientras el directivo regresó a Barranquilla optimista del fichaje del jugador, de inmediato le hicieron saber que ya James se había decantado por una buena oferta económica que le puso sobre la mesa el León de México, con el que viene figurando.

La noticia le cayó muy mal a la hinchada del Atlético Junior, que se hacía ilusiones con un jugador de postín. Muchos, en redes sociales, descargaron su rabia ‘rajando’ a James por no aceptar la oferta del elenco tiburón, y le aseguraron que cuando llegara a Barranquilla no iba a sentir los aplausos de siempre.

Pues bien, el ambiente difícil ya se ha comenzado a sentir, sobre todo este viernes 21 de marzo cuando se supo que el León de México fue rechazado por la Fifa para jugar el Mundial de Clubes que será este año en Estados Unidos.

Los seguidores del Junior han comentado en redes la situación, celebrando de alguna manera la postura de la Fifa, y recreando sus opiniones con fotos de James Rodríguez.

Sin embargo, el verdadero termómetro sobre el tema será el martes cuando la Selección Colombia enfrenta a Paraguay en el estadio Metropolitano. Aunque en su mayoría los asistentes a estos partidos son del interior del país, no se descarta que los barranquilleros reprueben a James cuando tome el balón, o por el contrario lo sigan aplaudiendo a pesar de dejar esperando al Junior.

Una situación hostil la vivió recientemente Juan Fernando Quintero, quien jugó en el Junior sin mucho éxito y después prefirió regresar a Argentina. En partido de Copa Sudamericana entre América y Junior, en Barranquilla, los asistentes al Metropolitano lo silbaron cada que tocó el balón.