Cultura
Cali se pinta de cine, conozca el mural más instagrameable de la ciudad
La fachada de la casa de don Andrés Velázquez, en el barrio San Antonio, se convirtió en una muestra gráfica de la historia del cine vallecaucano.
Las montañas que rodean a Cali permiten que la luz natural que ilumina la ciudad se conviertan en una herramienta perfecta para el séptimo arte. Así lo han considerado, durante años, cineastas y expertos en la producción audiovisual. Un pensamiento que compartía Eugenio Jaramillo Londoño, cinéfilo, maestro de cine y quien fue director de la Cinemateca La Tertulia por 38 años, un hombre al que sus amigos y familiares quieren homenajear por medio de un mural, que se está pintando en el tradicional barrio San Antonio y que ya atrae miradas de quienes caminan sus lomas.
Precisamente fue Eugenio quien inspiró la obra de arte. “La idea comenzó como un homenaje a este gran amigo de Andrés Velázquez (el dueño de la casa), quien lo recuerda con nostalgia. “Se conocían desde la adolescencia, fueron mejores amigos, y Andrés suele traer a su memoria las conversaciones que tenían siempre sobre cine y la importancia de Cali en la industria”, cuenta Paul Barrios, artista encargado del mural, y amigo de Velázquez.
Andrés suele prestar la fachada de su casa, ubicada en la carrera 1 con calle 10, un sector estratégico, por donde propios y turistas pasan cuando visitan el barrio. Más allá de prestarla para que los artistas despeguen su creatividad, el caleño, de 68 años, patrocina estos movimientos. “Ya hemos trabajado en varios murales, pero esta vez él quería hacerle un homenaje a su amigo, así nace la iniciativa”, continúa Paul.
El proyecto artístico, que inició como una manera de recordar el trabajo de Eugenio Jaramillo, poco a poco se fue transformando en una línea gráfica del tiempo del cine vallecaucano, el cual a través de la historia se ha convertido en un crisol de creatividad para el séptimo arte a nivel nacional.
Desde hace varias décadas, Cali ha estado ligada a la cinematografía, siendo el telón de fondo de numerosos hitos en la historia del cine colombiano, ha sido una ciudad pionera, que conquista a las audiencias, y aunque sus días más recordados son los de Caliwood, en realidad esta pasión por los sets y las cámaras viene desde generaciones anteriores.
“Pensamos que era pertinente hacer un mural que también mostrara la historia del cine caleño, teniendo en cuenta su la importancia a nivel regional y nacional”, explica Paul, quien se graduó como artista plástico de la Universidad de Caldas.
El mural, que está ubicado frente a La Colina de San Antonio, muestra un retrato de Eugenio proyectando en orden cronológico una serie de películas vallecaucanas, que han sido representativas y que de alguna manera han tenido relación con la Sucursal del Cielo, —o del cine—.
El proyecto artístico inicia con un clásico, ‘María’, basada en la novela de Jorge Isaacs, una película de 1922, dirigida por Máximo Calvo y Alfredo del Diestro, “se filmó en la hacienda el Paraíso. Pero se perdió en la historia, porque se dañaron las cintas, y quedaron alrededor de 20 a 22 segundos de fotogramas. A pesar de que sus escenarios fueron otros sectores del departamento, la edición, en especial del sonido, fue acá”.
La segunda película que refleja el mural es ‘La gran obsesión’, dirigida por Guillermo Rigondeaux, sobre ta la historia de una mujer que toma un tren en búsqueda de una ‘mejor vida’, (que según ella se la daría la capital).
“Es un filme hermoso, porque se ven los paisajes del Valle de Cauca; tiene tintes feministas a la luz del momento y ha marcado un hito importante en la historia del cine nacional”, explica Barrios, quien actualmente se encuentra trabajando en un largometraje, en honor a su padre, Germán Barrios, quien fue desaparecido en 2008.
En la lista también se encuentra ‘La mansión de Araucaima’, dirigida por Carlos Mayolo en 1986, a partir de un guion de la novela homónima de Álvaro Mutis. Además, en los fotogramas pintados de la pared se representa ‘El vuelco del cangrejo’ que fue estrenada en el 2009. Grabada en La Barra (Pacífico), este es un filme de Óscar Ruiz Navia, y relata Barrios que fue “la primera película que se presentó en un festival de categoría (en África)”.
Mientras la gente va caminando, puede apreciar una escena de la ‘Tierra y la sombra’ de César Augusto Acevedo, que muestra cómo impacta en las comunidades campesinas la industria de la caña de azúcar. En 2015, el proyecto audiovisual de una hora y treinta y siete minutos recibió un galardón de la crítica en los premios Cannes.
Cabe anotar que para la selección de los fotogramas que se plasmaron en el mural, Paul vio, con detalle, cada una de las películas, una actividad que además de apasionarlo por la cultura del Valle del Cauca, le sirvió como fuente de inspiración; pero no todos los filmes fueron fáciles de obtener, el último que aprecian los caminantes de San Antonio es ‘Yo vi tres luces negras’, del cineasta Santiago Lozano, y que pronto llegará a las salas de cine de la ciudad, después de su estreno en el Festival de Cine de Berlín.
Dicha historia sumerge al lector entre los ríos de Aguas Claras, en el camino de Cali al Pacífico colombiano, “una tierra de todos, pero por la que muy pocos ‘sacan la cara’, azotada por la violencia, pero con una comunidad cálida, con costumbres espirituales distintas a las que vemos en la ciudad”, menciona Paul, mientras turistas y propios se toman fotos con el mural más instagrameable de San Antonio.