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Las declaraciones del exministro Luis Fernando Velasco que agitan al gobierno Petro en el caso de corrupción de la UNGRD
Velasco negó haber dado órdenes para presuntos sobornos mientras fue Ministro del Interior.
Las declaraciones del exministro del Interior, Luis Fernando Velasco, ante la Corte Suprema de Justicia, en las que negó haber dado órdenes para presuntos sobornos en la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD), reavivan el debate sobre posibles implicaciones para el presidente, Gustavo Petro, y su círculo cercano.
Velasco, quien compareció durante más de cinco horas en el alto tribunal, fue cuestionado por su presunta participación en reuniones políticas y la supuesta entrega de dinero a congresistas para impulsar proyectos legislativos del Gobierno.El exministro rechazó los señalamientos y aseguró que no asistió al desayuno del 25 de septiembre de 2023, donde, según Olmedo López, se habrían discutido acuerdos políticos irregulares.
VELASCO SE DESMARCA DEL ESCÁNDALO
El exministro dejó claro que no tuvo influencia en el nombramiento de Olmedo López como director de la UNGRD. Según Velasco, López “no me dio confianza, no me gustó la entrevista”, pero fue el presidente Petro quien tomó la decisión de nombrarlo.
También aclaró que López asistía a consejos de ministros y reuniones convocadas por el Departamento Administrativo de la Presidencia (Dapre), pero que “no era un actor político central”. Velasco desmintió cualquier participación en el supuesto “cónclave” de noviembre de 2023, mencionado por López, en el que se habrían direccionado contratos.
Sobre este señalamiento, fue tajante: “¿A qué se refiere Olmedo López cuando habla de cónclave para direccionar contratos? No tengo ni idea porque, en lo que a mí respecta, nunca ocurrió”. En relación con los pagos denunciados, Velasco fue enfático al afirmar: “Ningún conocimiento y además no di ninguna orden en ese sentido. Ni directa, ni indirecta”.
También negó cualquier relación con Sandra Ortiz, exconsejera para las Regiones, imputada por la Fiscalía y señalada como intermediaria en la entrega de $4.000 millones a los ex presidentes del Congreso Iván Name y Andrés Calle.
Velasco reconoció que trabajó de cerca con Carlos Ramón González, exdirector del Dapre, en la gestión de contactos políticos, pero aclaró que estas acciones formaban parte de las tareas habituales de coordinación en el Gobierno. El exministro también mencionó un evento en Boyacá, donde coincidió con Sandra Ortiz durante la entrega de carrotanques para atender problemas de agua, pero insistió en que no conocía detalles sobre los pagos denunciados por Sneyder Pinilla.
PETRO Y SU GABINETE EN LA MIRA
Las declaraciones de Velasco podrían impulsar nuevas investigaciones sobre las decisiones tomadas en la Presidencia y los presuntos pagos a congresistas, que según Sneyder Pinilla, exsubdirector de la UNGRD, alcanzaron los $4.000 millones.
Mientras avanza el proceso judicial, las declaraciones del exministro generan dudas sobre la responsabilidad de otros funcionarios, incluidos asesores clave como Sandra Ortiz, quien ya ha sido imputada, y Carlos Ramón González.
La Corte evalúa si existieron omisiones o presiones políticas para agilizar contratos cuestionados en la UNGRD. En medio de este panorama, Velasco reiteró su inocencia y rechazó cualquier vínculo con la entrega de dinero a congresistas.
Sin embargo, la Fiscalía, la Corte y los órganos de control siguen recopilando pruebas que podrían determinar si existieron irregularidades desde la Presidencia o el gabinete ministerial. La investigación continúa en curso, y las declaraciones de Velasco podrían marcar un giro en el caso, acercando el proceso al núcleo de poder de la Casa de Nariño.
