Las bebidas que se deberían evitar durante un vuelo, según azafata

Durante un vuelo, especialmente en trayectos largos, muchas personas buscan mantenerse hidratadas, relajarse o simplemente disfrutar de una bebida como parte de la experiencia.

Sin embargo, no todas las opciones disponibles a bordo son recomendables, ya que hay algunas que podrían ser contraproducentes para la salud de los pasajeros.

Una de las bebidas menos recomendadas es el agua del grifo que se sirve en los aviones, incluyendo la que se utiliza para preparar café y té. Así lo señaló Sue Fogwell, exazafata con 22 años de experiencia, en una entrevista para la reconocida revista Travel + Leisure.

“Nunca bebí agua del grifo”, afirmó Fogwell, quien explicó que esta proviene de los tanques internos del avión, estructuras difíciles de limpiar y que, según diversos estudios, pueden albergar bacterias como coliformes e incluso E. coli.

Investigaciones realizadas por la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos (EPA) respaldan esta preocupación. Uno de los estudios de la entidad, realizado en 2004 y citado por el medio El Imparcial, reveló que un 13 % de las muestras tomadas en 158 aviones contenían bacterias coliformes, así como altos niveles de E. coli.

Así mismo, un informe de 2019 elaborado por DietDetective.com y el Hunter College NYC Food Policy Center de la City University of New York, concluyó que muchas aerolíneas estadounidenses no garantizan completamente la seguridad del agua potable a bordo.

“Las aerolíneas regionales necesitan mejorar su seguridad en el agua a bordo”, declaró en su momento Charles Platkin, editor de DietDetective.com y director ejecutivo del centro de investigación alimentaria.

Ante este panorama, los expertos recomiendan a los pasajeros optar por agua embotellada o bebidas enlatadas, que ofrecen un mayor nivel de seguridad e higiene, especialmente durante trayectos prolongados.

Pero el agua del grifo no es la única bebida que debería evitarse a gran altitud. Fogwell también advirtió sobre el consumo de bebidas carbonatadas y aquellas con alto contenido de sodio, ya que pueden intensificar problemas digestivos y provocar una mayor sensación de deshidratación.

Estas reacciones, según expertos, se ven potenciadas por la baja humedad y los cambio s de presión en la cabina del avión.

De acuerdo con la exazafata, tanto los alimentos como las bebidas ricos en sodio contribuyen a que los pasajeros se sientan más hinchados y deshidratados durante el vuelo, algo que puede resultar especialmente incómodo en viajes largos.

Por su parte, Josephine Remo, extripulante que voló durante siete años, citado por el mismo medio, sugirió evitar cualquier alimento que produzca gases.

“En un avión, el cambio de presión del aire puede causar malestar estomacal... Por eso, siempre evito comer alimentos que me inflaman y me hacen expandir aún más el estómago como cebolla, col rizada, frijoles, carne roja, lentejas, gluten y brócoli”, precisó.