Seis errores comunes al usar un electrodoméstico que pueden provocar un incendio en el hogar

Los electrodomésticos son aliados indispensables en la vida moderna. Sin embargo, su mal uso o descuido puede convertirlos en una de las principales fuentes de incendios en el hogar. De hecho, según informes de bomberos y aseguradoras, una gran parte de los incendios domésticos tiene su origen en fallas eléctricas o en el uso incorrecto de aparatos eléctricos comunes.

El peligro no está solo en aparatos antiguos o defectuosos: incluso un electrodoméstico nuevo, si se usa de forma inadecuada, puede representar un riesgo importante. Por eso, conocer los errores más frecuentes y saber cómo prevenirlos es clave para proteger su hogar.

A continuación, se detallan seis errores más comunes al utilizar electrodomésticos que pueden provocar incendios, junto con consejos prácticos para evitarlos.

1. Sobrecargar enchufes y regletas

Conectar varios electrodomésticos potentes en una misma toma o regleta puede sobrecalentar el circuito y provocar un cortocircuito o incendio. Este error es muy frecuente con equipos como microondas, hornos eléctricos, cafeteras o secadoras.

Consejo: Use enchufes independientes para electrodomésticos de alto consumo y evita regletas baratas o sin protección contra sobrecargas.

2. Dejar aparatos encendidos o en funcionamiento sin supervisión

Olvidarse de apagar una plancha, dejar funcionando el horno o la freidora de aire mientras sales, o dormir con un calentador eléctrico encendido puede generar acumulación de calor y riesgo de ignición si algo falla.

Consejo: Nunca deje electrodomésticos encendidos sin vigilancia. Algunos deben usarse solo en presencia de un adulto.

3. Instalar electrodomésticos en lugares inadecuados

Ubicar electrodomésticos cerca de cortinas, muebles inflamables, o sin espacio suficiente para la ventilación, puede provocar un sobrecalentamiento o una combustión accidental.

Consejo: Asegúrese de que cada aparato tenga suficiente ventilación y esté lejos de materiales combustibles.

4. No limpiar filtros o ventilaciones regularmente

Aparatos como secadoras, campanas extractoras, aires acondicionados o refrigeradores acumulan polvo, grasa o pelusa en sus filtros. Esto puede actuar como material combustible si hay una chispa o sobrecalentamiento.

Consejo: Limpie los filtros de forma periódica y revise las instrucciones del fabricante para el mantenimiento adecuado.

5. Usar electrodomésticos con cables dañados o en mal estado

Cables pelados, enchufes flojos o con chispazos son señales de un posible riesgo eléctrico. Usar electrodomésticos en estas condiciones puede generar un cortocircuito o incendio.

Consejo: Revise regularmente el estado de los cables y no uses aparatos con daños visibles. Cambie el cable o reemplaza el equipo si es necesario.

6. Ignorar el manual de instrucciones o hacer conexiones caseras

Modificar el cableado, instalar enchufes no compatibles, usar adaptadores inadecuados o conectar aparatos de forma improvisada puede provocar fallas eléctricas graves.

Consejo: Siempre siga las indicaciones del fabricante y, si es necesario, consulte a un técnico certificado para instalaciones o reparaciones.