¿Qué le pasa a los dientes si se cepillan con vinagre de manzana?

Un blanqueamiento dental es un procedimiento que seguro muchas personas en el mundo desean hacerse, y más si es de los creyentes de la frase “la sonrisa es la puerta del alma”. Sin embargo, ante el obstáculo de no poder contar con el dinero suficiente para costear este tratamiento, muchos optan por buscar opciones que les ahorre tiempo y el gasto económico que esto representa.

Sin embargo, vale la pena recordar que este tipo de tratamientos de forma económica o caseros no resultan teniendo la misma o siquiera la mitad de la eficiencia que el verdadero. Además, puede que realizando este tipo de procedimientos, en vez de blanquear los dientes, resulten haciendo otro efecto totalmente adverso al esperado y se afecte la salud de los dientes, la boca o del cuerpo en general.

En internet hay muchas recomendaciones acerca de productos naturales para realizar un blanqueamiento casero. Unos resultan más efectivos que otros y uno tantos son completamente falsos, por tal motivo, en este artículo se presentarán algunos consejos para poder tener un blanqueamiento dental efectivo sin gastar mucho dinero y sin salir de casa.

Vinagre de manzana para lograr un blanqueamiento dental

Según los expertos, una sola cucharada diluida en una taza de agua puede servir como enjuague bucal después de haberse cepillado con normalidad. Este vinagre actúa eliminando las manchas, blanqueando el esmalte y eliminando las caries o bacterias que se acumulan en la cavidad bucal.

El vinagre contiene ácido acético, reconocido por su propiedad antiséptica y desinfectante. Sin embargo, siendo un ácido, la exposición prolongada sobre los dientes puede ocasionar erosiones sobre el esmalte, haciéndolos más porosos.

Otros productos para el blanqueamiento dental

Agua oxigenada

Junto con bicarbonato de sodio, pasta dental y agua, esta mezcla podría ayudarle a mejorar el aspecto de sus dientes, actuando como la crema que usualmente se usa para cepillarse los dientes. Se recomienda hacerlo una vez por semana y promete eliminar el sarro y darle un color más blanco a los dientes.

Esto es porque el agua oxigenada es un antiséptico efectivo que puede blanquear los dientes, sin embargo, a su vez puede dañar, quemar o irritar las mucosas y causar hipertrofia. Asimismo, el bicarbonato raya el esmalte, por lo que da un aspecto blanquecino.

Limón

La recomendación es mezclar el zumo del limón con agua y utilizarlo como enjuague bucal durante 5 minutos. Su efectividad se basa en que el ácido cítrico produce un efecto químico que afecta el calcio de los dientes, lo cristaliza y moviliza, por lo que también puede debilitar la dentadura.

Plátano

Luego de cepillarse los dientes común y corriente con el dentífrico, se recomienda frotar la cáscara del plátano en los dientes, pues al contener el ácido salicílico, se puede recuperar el tono blanco de estos.

La cáscara de plátano también contiene ácido cítrico. No obstante, el ácido salicílico también desgasta el esmalte de los dientes.

Laurel y cáscara de naranja

Para esta opción, se recomienda machacar las hojas del laurel con la cáscara de naranja y mezclarlo con la pasta de dientes. Esta mezcla, a través del ácido málico de la naranja, actúa como supuesto limpiador de los dientes de una manera profunda, trabajando junto con las propiedades del laurel.

Vale advertir que el ácido málico de la naranja también puede generar un desgaste en el esmalte dental, por lo que se recomienda no hacerlo de forma muy continua.

En conclusión, si bien son opciones económicas, caseras y quizás rápidas, todos estos procedimientos sin duda alguna resultan siendo perjudiciales a mediano o largo plazo para la salud tanto dental como bucal. Esto debido a que ninguno ofrece una rápida solución u óptima efectividad con una sola aplicación.

De igual forma, se recomienda, antes de seguir alguna de estas recomendaciones, que se acuda a un experto dental para pedir un consejo al respecto, así como si se obtienen resultados adversos para la salud y poder ser tratados de la forma adecuada.