SALUD
La semilla que ayuda a reducir la tensión arterial y el colesterol
Tiene importantes beneficios para la salud.
Una de las semillas con más beneficios es el ajonjolí, que también se conoce como semillas de sésamo. Esta es una planta originaria de la India y de África que, en sus inicios, se utilizaba para espesar y dar sabor a una gran variedad de platos. Actualmente, son de las semillas oleaginosas más usadas en la cocina y la repostería internacional, sobre todo la oriental, de acuerdo con la Fundación Española de la Nutrición (FEN). Asimismo, explica que más de la mitad del peso de la semilla es aceite, y el resto son proteínas (18 %) y fibra (8 %).
El portal portugués de salud, nutrición y bienestar Tua Saúde indica que “las semillas de ajonjolí contienen fibras solubles y compuestos como la sesamina y los fitoestrógenos, que ayudan a reducir el colesterol LDL, llamado “malo”, y triglicéridos en la sangre. Estos, a la vez, aumentan los niveles de colesterol HDL, llamado “bueno”. De esta manera mantienen el organismo saludable y previenen enfermedades cardiovasculares como aterosclerosis, accidente cerebrovascular e infarto de miocardio”.
Este portal también señala que esta semilla se asocia con la regulación de la presión arterial, puesto que ayuda a facilitar el flujo de la sangre por los vasos sanguíneos, debido a que contribuye a desinflamarlos .Adicionalmente, por su alto contenido de fibra, resulta beneficiosa para la regulación de la función intestinal.
Cuatro ejercicios para reducir el colesterol
De acuerdo con los especialistas, cuatro de los ejercicios o actividades físicas más recomendados para controlar los niveles de este lípido en el cuerpo son los siguientes:
Caminar
Si bien es probable que caminar no ofrezca los mismos beneficios que correr, ya que la intensidad es menor, lo cierto es que esta actividad física destaca como una alternativa aeróbica útil para tratar el colesterol alto, según una publicación de la revista Mejor con Salud.
Es una práctica que puede ejecutar cualquier persona. Lo ideal es realizar caminatas de 30 minutos al día a cualquier hora. Una opción es, por ejemplo, irse caminando al trabajo y regresar a la casa de la misma forma.
Nadar
Practicar este deporte demanda un importante gasto calórico y es una de las actividades más completas para mejorar condiciones generales de salud. Este ejercicio ayuda a la circulación de la sangre, especialmente la de las piernas, como consecuencia de las contracciones y descontracciones musculares que se producen al realizar los diferentes movimientos.
Bailar
Cuando a una persona no le agrada ir al gimnasio o salir a caminar, una alternativa viable es bailar para bajar el colesterol. La recomendación es tomarlo como una actividad constante y moderada, pues esto ayuda a movilizar las grasas del cuerpo y eliminar el glucógeno, que es la glucosa de más que se almacena en el hígado y los músculos.
Montar en bicicleta
Esta práctica es favorable, pero se debe conservar una intensidad moderada durante al menos 30 a 60 minutos. El consejo de los expertos es no realizar sobreesfuerzos. Los análisis científicos indican que practicar ciclismo ayuda a reducir los niveles de colesterol malo y a aumentar los del bueno. Al igual que ocurre con la natación, es una actividad física que no sobrecarga las articulaciones y con la que se ejercitan diferentes partes del cuerpo.