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Deficiencia de calcio: estos son los principales síntomas
El calcio es un nutriente esencial para el funcionamiento del cuerpo.
Si se habla de calcio, casi siempre se asocia con el sistema óseo del cuerpo, pero lo que pocas personas conocen es que en el torrente sanguíneo se transporta en 1% de este nutriente del organismo. El resto se encuentra en los huesos y dientes.
El calcio se transporta a través de la sangre por todos los órganos del cuerpo, este mineral es esencial para el buen funcionamiento de los nervios, músculos y el corazón. Por esta razón es crucial realizarse pruebas de calcio en suero sanguíneo, cada que su médico de confianza lo recomiende.
Existen dos tipos de pruebas de calcio en el cuerpo, la de calcio total, en la cual se mide el calcio total en su sangre, y la prueba de calcio ionizado, la cual se encarga de medir únicamente el “calcio libre” en la sangre, el cual no está unido a las proteínas.
Como se dice arriba, la manera adecuada de saber si se tienen niveles anormales de calcio es a través de un examen de sangre. Sin embargo, existen síntomas que pueden anunciar problemas de este tipo.
Entre los síntomas más frecuentes que se registran, con niveles altos de calcio, están el estreñimiento, náuseas y vómitos, dolor abdominal, falta de apetito, orinar con más frecuencia, aumento de la sed y confusión.
También se presentan calambres musculares, espasmos y rigidez con frecuencia. El hormigueo en los labios, la lengua, los dedos o los pies son constantes. Por último, se es propenso a sufrir de arritmias cardíacas.
Los estudios médicos han demostrado que los niveles volátiles de calcio en el organismo puede llevar al desarrollo de enfermedades crónicas en los riñones, al igual que afecta a la tiroides. Los pacientes que padecen de este desorden presentan desnutrición, problemas de absorción de suplementos de calcio y aumenta las probabilidades de la aparición de ciertos tipos de cáncer.
La vitamina que ayuda a absorber calcio para formar los huesos
Sin duda tener huesos fuertes es fundamental en todas las etapas de la vida, pero cuando llega la tercera edad, es fundamental que estas partes del cuerpo se encuentren bien fortalecidas, para evitar posibles fracturas.
En la búsqueda de la salud ósea, los expertos en nutrición han recomendado la ingesta de ciertas vitaminas que ayudan a la absorción correcta del calcio en el organismo.
Siendo así, aparece la vitamina D, la cual es en realidad una hormona que el cuerpo puede sintetizar cuando la piel está expuesta al sol. Esta sustancia es crucial en el proceso de absorción del calcio por parte de los huesos.
Se debe tener en cuenta que tener niveles bajos de vitamina D puede acarrear consecuencias devastadoras e irreversible en el cuerpo. En el caso de presentarse en menor de 14 años, el niño puede terminar en raquitismo, una enfermedad caracterizada por huesos frágiles.
Por su parte, si se presenta en personas adultas, se puede presentar la aparición de enfermedades óseas como la osteoporosis, una condición en la que los huesos se vuelven más delgados y susceptibles a fracturas.
Problemas de salud por falta de Vitamina D
Las personas que tienen niveles bajos de esta vitamina suelen ser propensos a sufrir problemas de salud relacionada con la presión arterial alta.
“En general, la vitamina D puede modificar el modo en que algunas sustancias químicas del organismo controlan la presión arterial. También, parece que la vitamina mantiene flexible y sano el revestimiento de los vasos sanguíneos. Si tienes un nivel bajo de vitamina D, tus arterias pueden volverse rígidas. Esto dificulta el flujo sanguíneo”, explicó Mayo Clinic.
Cabe recordar que las frutas cítricas como el limón, la naranja o la mandarina son una gran fuente de esta vitamina. Se recomienda ingerirlas enteras o en jugos.
