Salud
¿Cómo saber si hace falta colágeno en la cara? 5 señales de alerta
Esta proteína es esencial para tener una piel rejuvenecida.
El colágeno es una proteína que tiene muchas funciones importantes en el cuerpo. La organización enfocada en la salud infantil Nemours KidsHealth explica que ayuda a reforzar los huesos, permite que la piel y los tendones se estiren y ayuda en la curación después de sufrir una lesión.
También está asociado con la figura brillante y juvenil que tiene la piel en la infancia y juventud, sin embargo, con los años se va perdiendo esta proteína, razón por la cual este órgano empieza a arrugarse y perder vitalidad.
Aunque la disminución del colágeno es normal con los años, puede ocurrir que el proceso avance rápidamente aún en tempranas edades, lo cual no es algo normal. Si hay sospechas de que esto está ocurriendo en su rostro, la primera clave para identificarlo es la aparición repentina de arrugas, tanto en cantidad como en profundidad.
Esto se da porque la piel se torna más delgada y se estira, facilitando que se empiece a caer generando la impresión de la arruga. Otras cuatro señales de alerta para reconocer la pérdida rápida de colágeno son:
Menor elasticidad
En edades tempranas y la juventud, tanto la elasticidad del cuerpo como de la piel son una característica común. Se puede tomar con fuerza una mejilla y, al soltarla, esta volverá a su posición inicial. También se ve en los más pequeños que pueden estirarse de formas impensadas para una persona mayor.
Si le cuesta estirar tanto la piel como diferentes extremidades del cuerpo, es una muestra de que el colágeno está desapareciendo de su organismo.
Poros dilatados
Los poros de la piel también cambian cuando carece el colágeno, ya que sus paredes suelen verse más grandes y abiertas, haciendo parecer que el cuerpo está lleno de pecas o texturas oscuras que antes no se tenían.
Menos volumen facial
Como la piel se vuelve más fina, otra consecuencia es que la cara parecerá que ha perdido su volumen, haciendo que las mejillas se vean más hundidas y los pómulos menos definidos. El contorno facial pierde su figura en ojos y frente y, a nivel general, parece que la piel tiende a tomar dirección hacia el suelo.
Piel deshidratada
El colágeno, entre sus funciones, también ayuda a retener la humedad que se concentra en la piel, por lo que es natural que con su pérdida, también desaparezca la hidratación que abundada en el rostro. La expresión facial se notará con resequedad y como si estuviera descaspando levemente todo el tiempo.
Para contrarrestar estas situaciones hay varias opciones, siendo una de las principales la ingesta de colágeno bajo recomendación médica, lo cual ayuda a que el organismo tenga la proteína en una cantidad que ya ha dejado de producir por sí mismo.