¿Qué es la “muerte cruzada”, la medida con la que Guillermo Lasso disolvió el Congreso de Ecuador?

Ante la inminente posibilidad de ser destituido, el presidente de Ecuador, Guillermo Lasso, anunció la disolución del Congreso. Con la firma de la “muerte cruzada”, el mandatario acudió a la opción constitucional que tenía para disolver el Parlamento nacional.

El mandatario, que enfrenta un juicio político por un presunto peculado, ordenó “disolver la Asamblea Nacional por grave crisis política y conmoción interna”, se lee en el documento difundido por la Presidencia de Ecuador.

En un país sumido en la violencia ligada al narcotráfico y el descontento popular por el costo de vida, Lasso pidió al Consejo Nacional Electoral (CNE) convocar a elecciones generales anticipadas. “He firmado el Decreto Ejecutivo 741, con el objetivo de disolver la Asamblea Nacional y solicitar al CNE se convoque a elecciones”, escribió en su cuenta de Twitter en la mañana de este miércoles 17 de mayo.

Además, dirigió un mensaje a los ecuatorianos y ecuatorianas, a quienes dijo que “esta es la mejor decisión para darle una salida constitucional a la crisis política y conmoción interna que soporta el Ecuador y devolver al pueblo ecuatoriano el poder de decidir su futuro en las próximas elecciones”.

La Constitución de Ecuador establece que en un plazo máximo de siete días después de la publicación del decreto de disolución en el Registro Oficial, el órgano electoral convocará a elecciones legislativas y presidenciales para completar el actual mandato de cuatro años.

“Es una decisión democrática no solo porque es constitucional, sino porque le devuelve al pueblo ecuatoriano la posibilidad de decidir”, expresó Lasso en cadena nacional.

¿Qué es la “muerte cruzada”?

En el marco del juicio político en su contra, el derechista Guillermo Lasso enfrentaba tres posibles escenarios: ser destituido, disolver el Congreso o permanecer en el cargo con un Legislativo dominado por la izquierda. Con la recién conocida decisión, el presidente ecuatoriano se inclinó por la segunda alternativa.

La “muerte cruzada” es la opción constitucional a la que acudió el mandatario para disolver el Congreso. Sin embargo, esta tenía algunas condiciones, entre estas que debía decretarla antes de la votación de junio. Además, podía acogerse a esta medida solo una vez y en los primeros años de administración.

Con el anuncio de Lasso, está en manos del Consejo Nacional Electoral dar paso a elecciones generales anticipadas de donde saldría un gobernante encargado de terminar el actual período.

El mandatario ecuatoriano había señalado hace poco que apelaría a la causal de obstrucción de la ejecución del Plan Nacional de Desarrollo, que no requiere dictamen previo de la Corte Constitucional, para disolver el Congreso.

La ley también permite acudir a esta “muerte cruzada” por una grave crisis política y conmoción interna, y por arrogación de funciones. Sobre esta medida, el constitucionalista y analista político Rafael Oyarte explicó esta semana a AFP que este sería “notoriamente una irresponsabilidad política del presidente la mal llamada ‘muerte cruzada’”.

“Para evitar su destitución, permanece en el cargo tres o cinco meses más, dependiendo si hay o no segunda vuelta presidencial, y le entrega la banda presidencial a alguien de izquierda”, destacó el analista. Además, mencionó que la disolución del Congreso es el mejor escenario para el correísmo porque en los próximos 45 días Ecuador tendría elecciones.

Esa corriente política aspira retomar el poder a pesar de que su líder está condenado en Ecuador a ocho años de cárcel por corrupción. En un contexto de aumento de la violencia ligada al narcotráfico y de descontento popular por el costo de vida, el Congreso opositor veía en este juicio la posibilidad de dar fin al Gobierno de derecha y, así, tener una oportunidad para recuperar fuerzas de la mano de su líder: el exmandatario Rafael Correa (2007-2017).

*Nota con información de AFP