Excontralor Felipe Córdoba habla sobre su aspiración a la Presidencia: “Necesitamos unir al país”

Oriundo de Pereira, Carlos Felipe Córdoba Larrarte ha ocupado altos cargos públicos, como el de Contralor General de la República (2018-2022).

Luego de casi tres años por fuera de la arena política, ha decidido volver para aspirar a la Presidencia de Colombia, país al que espera contribuirle con base en su experiencia y una visión de la política como una actividad de entrega total hacia la población, como él mismo lo dice.

Córdoba cuenta que le gustaría avalar su candidatura con una gran alianza entre diferentes sectores y partidos.

¿Por qué quiere ser presidente?

Hace dos años y medio que salí de la Contraloría General. Yo le dije a Marcela, mi esposa, que además es de aquí del Valle: ‘Mi amor, ya he tenido la oportunidad de estar en muchos cargos, vamos a enfocarnos en fortalecer nuestro patrimonio’. Y en ese tiempo empecé a ver el deterioro de la seguridad, cómo nos han incumplido tantas promesas en materia de salud y educación, empecé a notar que la gente está pasando hambre en el país. Aquí tenemos 16 millones de colombianos que no saben qué van a desayunar, almorzar o comer.

¿Cómo se va a avalar? ¿Busca partido o a va a recoger firmas?

Creo que necesitamos tratar de unir el país. Y lo que considero es que sería muy importante una alianza de los partidos políticos para que ellos puedan poner unas reglas del juego claras. Tratar de unir, no solamente los partidos tradicionales, sino de todo: que se puedan unir partidos pequeños, todas esas agrupaciones, para poder generar una propuesta hacia 2026.

Mencionaba que le preocupa la seguridad, ¿qué cree que le hace falta al país?

A mí me duele cuando veo que están bombardeando con drones en Jamundí, o que lo hacen adicionalmente en otros municipios cercanos del valle. Es muy desafortunado y ver que no hay apoyo del Gobierno Nacional afecta aún más, ver que nuestra Fuerza Pública tiene las manos atadas. Deberíamos tener drones de las Fuerzas Armadas patrullando 24 horas al día para ver en dónde están los criminales, con cámaras térmicas, cámaras de rayos X, con una cantidad de tecnología que hoy existe y con la que deberíamos estar nosotros acabando con el bandido.

En materia de educación, ¿cómo ve la situación?

Hay un problema muy grave en materia de educación. Este Gobierno le prometió a los muchachos que les iban a condonar las deudas del Icetex y lo primero que hicieron fue quitarle el subsidio a la tasa del crédito. Uno empieza a ver cómo hay muchachos que ya han dejado de estudiar porque esa era la única oportunidad que tenían.

¿Y la salud?

Hace dos años y medio el Presupuesto General de la Nación era de 350 billones de pesos, mucho menos que ahora. Se atendió la crisis por covid. El colombiano que se quiso vacunar se vacunó. Llegaban los medicamentos en medio de la pandemia. El sistema de salud funcionaba, pero hoy ni siquiera llegan los medicamentos.

¿Qué propone usted para mejorar el transporte?

En el Siglo XXI uno todavía no se explica cómo no tenemos los trenes de cercanías, los trenes de carga, los trenes de personas que simplemente nos comuniquen a Buenaventura con el centro del país. Uno le puede decir al sector privado, nacional e internacional, que hagan esas grandes inversiones, mirar los ejemplos de Panamá o los países desarrollados, en donde ellos entendieron el modelo.

Últimamente parece que el Presidente ha aumentado las convocatorias a las calles y hasta pide que la Fuerza Pública no intervenga, ¿qué opina?

Dos cosas importantes. La primera, la Fuerza Pública tiene la obligación de salvaguardar la Constitución colombiana, por encima del mismo Presidente de la República. Aunque él sea el jefe de las fuerzas militares, su función como comandante de las mismas es salvaguardar nuestra Constitución.

Ahora, lo que vemos de la cara del Presidente, tal y como lo hemos visto en estos casi 3 años, es que es un hombre caprichoso, que lo que quiere es incendiar al país cuando no salen sus propuestas e ideas. Por ejemplo, en la consulta popular se iban a gastar 750.000 millones de pesos que necesitamos para que los paguen en el sector de la salud, para que le vuelvan a entregar los medicamentos a la gente.