Y Trump lo paró en seco

El domingo Donald Trump estuvo de muy mal humor porque jugando golf le dieron una gran paliza en su cancha de la Florida. Cometió errores infantiles, errores de aprendiz cuando lleva jugando golf 58 años.

Ese mal humor le alborotó una úlcera en el estómago y de allí que lanzara un desmesurado y salvaje zapatazo verbal a Gustavo Petro, algo desconocido en el mundo diplomático de los americanos.

Gustavo Petro se buscó la brusca reacción de Trump por algunas guachafitas al presidente gringo. Las hizo para conseguir su sueño dorado: ser contrincante del presidente del poderoso ‘imperialismo yanqui’ y para sacarle ventajitas electorales para su ‘Pacto Histórico’.

Entre la tormenta política por el zapatazo verbal de Trump a Petro, antier escuché a Petro charlando con Daniel Coronel y allí lanzó otro insulto personal a Trump, dijo que él es un ignorante sobre Colombia, que recoge chismes a unos millonarios casi mafiosos de la ultraderecha que viven en Miami. ¿Mostró Petro al colega Daniel Coronel alguna prueba seria de esa acusación? Ninguna.

¿Qué ocasiono la furia de Donald Trump el domingo contra Gustavo Petro? Que sus asesores le mostraron las fotos en Bogotá en donde unos irresponsables lanzaban piedras y flechas a la sede de la embajada americana en Bogotá. Esa acción fue una torpeza descomunal, porque ese edificio y sus guardias tienen la protección americana por ser territorio gringo. No es esa una escaramuza menor, irrespetar la embajada americana es una provocación grosera, que en la sombra empujaban varios parlamentarios del petrismo en plan electorero.

Ese grupo de irresponsables contra la embajada americana salió de La Universidad Nacional, convertida hoy en caleta para centenas de delincuentes. Por ese matoneo, el alcalde de Bogotá, Carlos Fernando Galán, les ha colocado una demanda criminal que ojalá tenga éxito castigándolos.

Última hora: En este minuto se derrumba la farsa jurídica contra el expresidente Álvaro Uribe. Lo siento por la juez Heredia, que sale muy mal librada, y por su amigo Iván Cepeda, insigne acusador del expresidente. Se acabó la farsa y el rocambolesco juicio contra el expresidente Uribe. Me alegro por su esposa, Lina Moreno, sus hijos y las candidatas del Centro Democrático María Fernanda Cabal, Paola Holguín y Paloma Valencia.