Los secretos de un hombre de 93 años que tiene la edad biológica de uno de 30

A los 70 años, Richard Morgan comenzó en una rutina de ejercicio que lo ha llevado a desafiar las expectativas de su edad cronológica. Con un cuerpo que es un 80% de músculo y solo un 15% de grasa, y su capacidad aeróbica comparable a la de alguien de 30 o 40 años, ha llamado la atención de investigadores de la Universidad de Limerick en Irlanda.

Su impresionante régimen diario de 40 minutos incluye remo, entrenamiento de fuerza y sesiones de alta y baja intensidad. Los científicos han registrado sus funciones cardiacas, pulmonares y musculares, encontrando que su corazón es excepcionalmente fuerte, superando incluso las expectativas para la edad actual de este dedicado deportista.

Publicado en el ‘Journal of Applied Physiology’, su caso destaca también una dieta rica en proteínas, vital para mantener su masa muscular y un metabolismo activo. Este enfoque en la salud y el ejercicio es respaldado por estudios que muestran que las personas mayores activas tienen un menor riesgo de mortalidad por todas las causas.

Investigaciones recientes, como un estudio de Harvard en 2023, sugieren que los cambios epigenéticos, en lugar de daños en el ADN, pueden ser la clave del envejecimiento. Al manipular la epigenética, los científicos lograron duplicar la vida útil de ratones mayores, lo que ofrece nuevas perspectivas para comprender y tratar el envejecimiento humano.

Estos hallazgos podrían revolucionar la comprensión y el tratamiento del envejecimiento y sus enfermedades asociadas, abriendo la puerta a intervenciones precisas que podrían entender la salud y la longevidad en humanos.

En este video se hace la entrevista de Richard Morgan cuando tenía 84 años, en ese momento manifestaba participar en los torneos de remo en Irlanda. De esta entrevista ya hace nueve años, pero sigue siendo un hombre que hoy sigue cuidando su estado físico y alimentación.

Papa Francisco suplica por un cese al fuego y “acceso seguro” a la ayuda humanitaria en Gaza

Luego de que este sábado revelara de que actualmente padece de una bronquitis, el papa Francisco desde la ventana de su estudio privado en el Palacio Apostólico pidió este domingo garantizar un “acceso seguro” de la ayuda humanitaria a la Franja de Gaza, donde los bombardeos israelíes persisten y la población palestina está al borde de la hambruna.

“Llevo cada día en el corazón, con dolor, el sufrimiento de la población en Palestina y en Israel debido a las hostilidades en curso”, dijo el papa tras el rezo del Ángelus, en la plaza de San Pedro del Vaticano.

“Aliento a que prosigan las negociaciones para un alto el fuego inmediato en Gaza y en toda la región para que todos los rehenes (israelíes) sean liberados y regresen con sus familiares, que los esperan con angustia, y que la población civil (de Gaza) pueda tener un acceso seguro a la ayuda humanitaria que necesita tan urgentemente”, agregó.

“Basta, por favor, paren”, insistió el pontífice jesuita argentino.

El sucesor de San Pedro también ha reclamado un acceso “urgente” a la ayuda humanitaria para los civiles palestinos. “Miles de muertos, heridos, desplazados y las inmensas destrucciones causan dolor, con consecuencias tremendas sobre los pequeños e indefensos, que ven comprometido su futuro”, concluyó.

Un reparto de ayuda humanitaria en la ciudad de Gaza terminó el pasado jueves en tragedia luego de que soldados israelíes abrieran fuego contra una muchedumbre que se abalanzó contra los camiones en búsqueda de alimentos. Según Hamás, 118 personas murieron.