‘Papá Pitufo’ juega sus últimas cartas para evitar la extradición: asilo en Portugal o plan B con EE.UU.

El destino judicial de Diego Marín Buitrago, más conocido como ‘Papá Pitufo’, pende de un hilo y se define a contrarreloj entre Lisboa, Bogotá y Washington.

El periódico El Tiempo reveló que luego de que el Tribunal Supremo de Justicia de Portugal aprobó un recurso de habeas corpus a su favor, y con la extradición ya autorizada desde el pasado 9 de mayo, la defensa del presunto capo del contrabando activó una jugada legal, solicitar asilo político en territorio portugués.

Según argumentan sus abogados, Marín sería víctima de una “persecución política” por parte del Gobierno colombiano y estaría en riesgo su integridad física si es repatriado, incluyendo la “posibilidad de un asesinato”.

Según el medio de comunicación, entre las pruebas presentadas ante la Agencia de Integración y Migración de Portugal, se encuentran 12 declaraciones públicas del presidente Gustavo Petro mencionando directamente al acusado, lo que según su defensa vulneraría su derecho a un juicio imparcial y equivaldría a una condena anticipada.

En el documento radicado ante las autoridades, también se resalta que Marín es ciudadano español, lo que en teoría lo protege frente a ciertos mecanismos de extradición entre países miembros de la Unión Europea. Todo este arsenal jurídico busca dilatar o impedir el cumplimiento de la orden de extradición emitida por Colombia, donde enfrenta cargos por concierto para delinquir y cohecho por dar u ofrecer.

Un historial de maniobras y fugas:

El caso de Marín no es nuevo en el escenario internacional. En 2024, cuando se encontraba detenido en España, obtuvo la libertad mientras se definía su extradición, tiempo que aprovechó para fugarse a Portugal, donde fue recapturado gracias a una circular roja de Interpol en diciembre pasado.

Desde entonces, su defensa ha utilizado todos los recursos legales disponibles para evitar su regreso al país, una estrategia que ha sido duramente cuestionada por las autoridades colombianas. El presidente Petro denunció que no existía una orden de captura activa en el sistema colombiano, lo que permitió la reciente liberación de Marín en Portugal. En su cuenta de X, escribió:

“Diego Marín...fue liberado por la justicia portuguesa, por falta de orden de captura colombiana, ¿por qué? Sus actividades criminales hacen del occidente de Colombia un lugar con violencia”.

El Mandatario también lanzó una advertencia a los supuestos agentes de inteligencia extranjeros involucrados en el caso:

“Les será prohibida la entrada a Colombia y se entregará toda la información a sus países de origen para lo pertinente”.