La razón por la que Richard Gere hizo enojar a Sylvester Stallone; la actriz que le pidió aceptar un coprotagónico

Por Isabel Peláez R., editora de entretenimiento y cultura de El País

Richard Tiffany Gere —nació en Filadelfia, Pensilvania, el 31 de agosto de 1949— procede de una familia estadounidense de ascendencia anglo irlandesa: su padre, Homer George Gere, era agente de seguros para Nationwide Insurance Company y su madre, Doris Ana

Tiffany, de quien tomó su primer apellido, cuidaba de sus cinco hijos: tres mujeres y dos varones. Él era el segundo.

Antes de pensar en ser actor, dio muestra de múltiples talentos en la escuela secundaria de su natal Filadelfia. De adolescente, tocaba la trompeta y el piano y sorprendía a todos con melodías que inventaba. Además, era un hábil gimnasta. Incluso obtuvo una beca en la Universidad de Massachusetts en Amherst, donde estudió filosofía, pero a los dos años fue un talento fugado.

Sus deseos de ser músico lo impulsaron a irse a Londres, para interpretar uno de los papeles protagonistas del musical ‘Grease’. Llevó una vida bohemia, a inicios de los años 70, frecuentando la península de Cape Cod (Massachusetts), junto a sus amigos. Allí conoció al productor artístico que lo animó a probar suerte con una obra teatral en Seattle. Su carrera como actor la comenzó en la Universidad de Princeton y el Seattle Repertory Theater. De allí se mudó a Nueva York.

Su talento e inteligencia innatos, sumados a su atractivo natural, le abrieron puertas en la actuación, sin duda alguna.

Su debut en el cine fue en 1975 en Quiero la Verdad, de Milton Kats. Pero despegó definitivamente en Buscando a Mr. Goodbar, con Diane Keaton.

No todos lo amaban. Antes, en 1974, Gere iba a protagonizar junto a Slyvester Stallone la película La Pandilla del Barrio, pero no se dio ‘match’ entre ellos, y tenían constantes enfrentamientos en el rodaje. Según el protagonista de ‘Rocky’, Gere, como compañero de escena, “era demasiado agresivo a la hora de los ensayos”, y eso le molestaba.

Pero lo que colmó la paciencia de Stallone fue cuando, durante el almuerzo, Richard volcó sobre su chaqueta la salsa de mostaza del pollo que comía. Suceso después del cual el joven Gere fue despedido de la producción.

Paralelo a sus inicios como actor, se acercó al budismo. En 1977 viajó a Nepal y se entrevistó con monjes tibetanos y lamas. Llegaron los ochenta y con ellos éxito tras éxito de la joven promesa: American Gigoló, Oficial y Caballero, Cotton Club o Power. Entre rol y rol, Gere viajaba por el mundo buscando sus propias causas. Estuvo en Honduras, Nicaragua y El Salvador.

En los 90, el arrollador éxito de Pretty Woman o Mujer Bonita, junto a Julia Roberts, relanzó su carrera. En dicha película, él compuso la pieza que tocó para Vivian Ward, una prostituta. Contó el actor a la prensa que, cuando le ofrecieron el papel, Julia le dijo: “Por favor, di que sí”. Quizá por eso formaron una de las parejas más inolvidables del cine.

Siempre lo han acompañado en sus películas talentosas como bellas actrices: Jodie Foster, en Sommersby; Kim Basinger, en Análisis Final; Debra Winger, en Oficial y Caballero; Julia Ormon, en El Primer Caballero; Catherine Zeta-Jones y Renée Zellweger, en Chicago; Wynona Ryder, en Otoño en Nueva York; Sharon Stone y Lolita Davidovich, en Entre Dos Mujeres; Jena Malone, en Time Out Of Mind, y Diane Lane, en Noches de Tormenta, Cotton Club e Infiel.

Con quien formó la pareja más sexy del mundo, ya no en la ficción, sino en la realidad, según People, que los publicó en su portada con dicho título, fue la top model Cindy Crawford, con quien se casó en Las Vegas en 1991, cuando ella tenía 25 años y él 42. Duraron cuatro años.

Mientras más le atribuían el sello de seductor, él más trataba de quitarse esa etiqueta, eligiendo roles de mayor carácter y en géneros distintos al drama y al romance, como el thriller.

Así llegaron filmes como Análisis Final, En el Filo de la Duda y Las Dos Caras de la Verdad. Fue taquillero con Chacal, y sus seguidoras amaron su repetición con Roberts en Novia a la Fuga.

Pese a lucir su canosa melena ya en los 2000, seguía siendo considerado uno de los actores más sexys, con papeles como Chicago, ¿Bailamos?, El Caso Wells, La Sombra del Cazador o Los Amos de Brooklyn. Con la interpretación del abogado defensor Billy Flynn, en la adaptación cinematográfica del musical de Broadway, Chicago, en 2002, ganó un Globo de Oro.

Ese año se casó con la exchica Bond, Carey Lowell, luego de siete años de novios y un hijo: Homer James Jigme (en tibetano: ‘valiente’). En 2013 empezó una tensa batalla legal hasta su divorcio, tres años después. A los meses conoció en el hotel Treville de Positano a la publicista y activista española Alejandra Silva, 34 años más joven. En 2018 se casaron y son padres de dos hijos. Ella tiene otro con su ‘ex’, el magnate Govind Friedland.