Elecciones
“Los colombianos pueden quedarse hasta con el 10 % del dinero que se encuentre en esa casa donde denuncien compra de votos”, dice el Ministro del Interior
Luis Fernando Velasco estuvo en Cali liderando un Puesto de Mando Unificado.
Por Olga Lucía Criollo y Sofía López
La principal amenaza de las elecciones del domingo “son los bandidos que se han robado los departamentos y los municipios, y que van a intentar comprarnos la elección para seguirse robando los territorios”, aseguró en Cali el ministro de Interior, Luis Fernando Velasco.
El pasado miércoles el funcionario estuvo en la capital del Valle del Cauca, en donde inició una gira por distintas zonas del país para verificar las medidas de seguridad y de transparencia que garantizarán el éxito de los comicios territoriales que tendrán lugar este domingo 29 de octubre en Colombia.
En entrevista con El País, Velasco se refirió a la forma en que la se está enfrentando la violencia política en Jamundí y Tuluá, entre otros municipios de la región.
Señor Ministro, ¿qué panorama encontró en Cali y el Valle de cara a las elecciones del domingo?
Un primer elemento que quiero resaltar y que valoro es que me senté con el Puesto de Mando Unificado, PMU, y ahí estaban las Fuerzas Militares, la Policía, la Procuraduría, la Registraduría, la Fiscalía, la Gobernación y la Alcaldía de Cali, y ahí encontré una coordinación interinstitucional que ha dado resultados.
La amenaza de Tuluá la estamos respondiendo, pero el Gobierno Nacional puede responder porque encuentra a esas instituciones enfrentando las amenazas. Hay problemáticas en el occidente colombiano, claro que las hay en el Valle del Cauca; no las desconocemos, pero, como las reconocemos y se trabaja coordinadamente, se está dando una respuesta interesante.
Pero además de Tuluá, también hay preocupación por Jamundí...
La gente tiende a pensar que el problema de ese municipio está en la cordillera y evidentemente allá hay unas dificultades, entre otras cosas, aprovecho para traer un mensaje del general Giraldo (comandante de las Fuerzas Militares) y es pedirle a las autoridades del Valle que agilicen la consecución del terreno en donde el Gobierno y las Fuerzas Militares quiere montar una base de alta montaña para controlar Los Farallones. Eso significa mejorar la seguridad de Cali, de Jamundí y del Valle en general. ¿Cuál es mi preocupación? yo conozco la zona y hay gente dando un debate político legítimo, pero también pueden aparecer financiadores de campañas que en el fondo lo que están buscando es un volteo de tierras en el que un negocio, una resolución mal hecha por parte de una oficina de Planeación, puede significar un negocio millonario. Entonces me preocupa que frente a ese interés puedan haber expresiones de violencia y así se lo manifesté al PMU.
¿Hay otro municipio del Valle del Cauca que le preocupe?
Buenaventura siempre ha tenido dificultades y, como las reconocemos, las estamos enfrentando. Han existido algunas manifestaciones que no tienen que ver con el proceso electoral, pero generan intranquilidad, como lo que pasó con Cartago por ejemplo, pero aprovechamos para adelantar acciones que permitan responder a las demandas de seguridad de los ciudadanos.
¿Y cuál es la situación en el norte del Cauca?
El Cauca tiene dificultades, hoy tenemos unos inconvenientes grandes en El Plateado, porque decidimos tomarnos el municipio y la gente debe entender que hace dos años la Fuerza Pública no hacía ningún tipo de presencia allá, pero hoy nuestro Ejército se ha tomado los altos de la localidad y el casco urbano, pero las acciones son realmente encomiables, llegamos a las zonas más minadas de este país, hemos tomado esas posiciones y tenemos la capacidad militar de tomarnos El Plateado, pero como Gobierno somos responsables, si usted le ordena a la Fuerza Pública que se tome el corregimiento, se lo toma, pero es un combate en una zona donde hay siete mil campesinos y no podemos arriesgar la vida de los campesinos porque, obviamente, habrían muchas bajas civiles.
Por eso estamos haciendo una acción política diciéndoles a los miembros del Estado Mayor Central que si han pactado con el Ejecutivo un cese al fuego, deben demostrar su voluntad y dejar tranquila a la población, hacerse a un lado para que entre la Fuerza Pública y permitir un proceso electoral tranquilo.
En varias ciudades van a aparecer candidatos en el tarjetón que ya no lo son porque se retiraron o fueron inhabilitados, ¿no cree que eso puede prestarse para confusiones entre los electores?
Nosotros tenemos que ser respetuosos de las decisiones que tomen los órganos electorales y en lo administrativo y judicial, pero sí hacemos una firme y respetuosa solicitud: cuenten todos los votos. Si ustedes consideran que no son válidos, porque la persona no tiene el aval, háganlo saber así, pero no desaparezcan votos porque puede generar un conflicto. Lo dije en la Comisión de Seguimiento Electoral hace dos tres días en Bogotá: es muy delicado que en una en una mesa, por ejemplo, aparezcan 300 votos para el Concejo, pero solo 100 para el Alcalde. El ciudadano no va a entender la filigrana electoral cuando desaparezcan 200 votos y nos puede generar un problema de orden público muy grande. Si hay ese debate, que luego lo resuelva la jurisdicción contenciosa, que tiene unas responsabilidades en lo electoral, pero nuestra solicitud respetuosa al Consejo Nacional Electoral y a la Registraduría es que cuenten todos los votos y digan cuáles son válidos y cuáles no.
¿Cómo va a funcionar la logística de la recompensa por denuncias de compras de votos que ofreció el presidente Petro?
Esa es una es una acción que se viene haciendo, la legislación colombiana permite que el Estado entregue retribuciones económicas a quien ayude a desestructurar organizaciones criminales como las bandas de ‘políticos’ que, a cambio de servirle a la gente, terminan comprando alcaldía y gobernaciones y que, cuando tienen ese poder, se quedan con la plata de la salud, de la comida de los niños, de la educación y le hacen un daño terrible a la sociedad. Nosotros queremos enfrentarlos con varios mecanismos. Primero, la Registraduría está colocando en muchas mesas el control biométrico, entonces, cuando un ciudadano entre a votar y pase su cédula, le van a hacer la prueba: puede ocurrir que el portador del documento no sea el que aparezca en la biometría y ahí ya hay algo irregular. En caso de que compruebe que están tratando de suplantar al elector, eso es un delito y da cárcel.
A aquellos que compran votos, les estamos diciendo que puede haber hasta cinco millones de pesos si nos señalan quién es el que está intentando comprar votos, pero hay otros elementos, hay casas de compras de votos, les damos hasta $20 millones, pero además le decimos que, en el marco de un proceso de extinción de dominio, los colombianos tienen la opción de quedarse hasta con el 10 % del dinero que se encuentre en esa casa. Pongo un ejemplo, si mi memoria no me falla, hace algunos años en Barranquilla hubo un caso muy conocido, se incautaron cerca de $5000 millones, lo que significa que si alguien hubiese entregado esa información, se hubiese podido quedar con $500 millones , o sea, informar le sirve a la sociedad, pero también le sirve al que informa.
Es todo un reto para este Gobierno organizas sus primeras elecciones...
Claro, por eso tenemos más de 250.000 hombres dando seguridad en todo el país, hemos intentado hacer una coordinación interinstitucional, por eso no desconocemos los problemas que se enfrentan y queremos superarlos. Seguiremos la gira en Pereira, en Barranquilla, en Medellín y dispuestos en cualquier momento a salir adónde tengamos que ir.
¿Hay algún sector del país que le genere especial preocupación?
Muchos, y tenemos que ser muy cuidadosos, la gente tiende a pensar que la gran amenaza del proceso electoral es la presencia de grupos insurgentes en algunas zonas del país, sí, ese es un inconveniente, pero la principal amenaza son los bandidos que se han robado los departamentos y municipios y que van a intentar comprarnos la elección para seguirse robando los territorios. Algunos de ellos con gran habilidad han armado un debate, una gran cortina de humo diciendo que el gran problema es la insurgencia, ese es un problema, lo estamos enfrentando y confío en nuestros generales, almirantes, el director de la Policía y los soldados que enfrenten esa amenaza, pero le pido a los ciudadanos que nos ayuden a enfrentar a los bandidos que se quieren robar las regiones.
¿Un mensaje para los electores a dos días de los comicios?
Usted tiene en su mano un arma poderosísima, que es el voto. Escojamos bien, cuando uno toma malas decisiones, esas decisiones pesan durante mucho tiempo. Si yo vendo el voto, en el fondo lo que estoy haciendo es autorizando a alguien, que invierte en comprar mi voto, a que me robe la tranquilidad mía y la de mi familia; la plata de la salud y de la educación en los próximos cuatro años. Enfrentemos a esos bandidos.