Economia
¿Hubo cambio en el recibo de luz? Confirman quiénes están pagando más desde este mes
Esta medida está programada para durar seis meses y se espera recaudar más de 51 mil millones de pesos.
El Decreto 1250 del 2023 marcó el inicio de una serie de medidas tomadas en respuesta a la situación de emergencia económica en Colombia, y específicamente en La Guajira. Este decreto otorgó al Ministerio de Vivienda funciones especiales para abordar el acceso al agua potable en la región. A pesar de algunas objeciones, el decreto se mantiene vigente, lo que ha llevado a un aumento en las facturas de electricidad para muchos colombianos.
A partir de agosto, las empresas de energía eléctrica comenzaron a incluir un cargo adicional en las facturas de servicio como consecuencia de la declaración del estado de emergencia. Este cargo adicional se implementó como un medio de recaudar fondos para abordar la crisis humanitaria en La Guajira. Sin embargo, persisten problemas de corrupción en la región que aún no se han abordado adecuadamente.
Según la normativa, este recargo se aplica con el propósito de superar la crisis humanitaria en La Guajira y prevenir la propagación de sus efectos, en el contexto del Estado de Emergencia Económica, Social y Ecológica declarado en el departamento. Esto ha resultado en facturas de electricidad más costosas para los residentes y propietarios de viviendas en los estratos 4, 5 y 6, con un aumento de 1,000 pesos en sus tarifas. Aquellos con propiedades comerciales e industriales están contribuyendo con 5,000 pesos adicionales.
Esta medida está programada para durar seis meses y se espera recaudar más de 51 mil millones de pesos. Los fondos se destinarán a soluciones energéticas en las Zonas No Interconectadas (ZNI) del departamento de La Guajira, dirigidas principalmente a la población rural. A pesar de los desafíos, esta iniciativa busca abordar la crisis humanitaria y mejorar el acceso al agua potable en la región.
¿Por qué los estratos 4, 5 y 6 pagan más en el recibo de la luz?
De acuerdo con el decreto, la razón detrás de que los residentes de estratos más altos paguen tarifas más elevadas radica en que “los valores promedio a pagar son superiores a $100,000, lo que significa que existen usuarios con una capacidad de pago que les permite realizar un aporte adicional en el costo de cada factura sin afectar sustancialmente su capacidad de pago”.
Este aumento afecta al 19% de los usuarios a nivel nacional, aquellos con un mayor poder adquisitivo que podrían contribuir en la situación de emergencia, según establece la normativa.
Esta medida plantea un paralelismo con la idea propuesta por el presidente Gustavo Petro hace unas semanas, donde se sugirió la posibilidad de incluir el costo del transporte público en la factura de electricidad de todos los colombianos. Aunque inicialmente se planteó como una idea, el Ministerio de Transporte está explorando su viabilidad y una encuesta reciente reveló el nivel de apoyo que podría tener esta propuesta entre la población.
¿Cuántas personas en Colombia no cuentan con el acceso a los servicios de energía y gas?
En Colombia, aproximadamente una de cada cinco personas se encuentra en una situación de pobreza energética, lo que equivale a alrededor de 9,6 millones de individuos. Esto significa que estas personas carecen de acceso a la electricidad y no disponen de una fuente de energía adecuada para cocinar, según revela el primer informe del Índice Multidimensional de Pobreza Energética (Impe), desarrollado por Promigás, una filial de Corficolombiana, junto con su Fundación e Inclusión S. A. S.
El informe enfatiza que Colombia enfrenta el desafío de proporcionar acceso a servicios y recursos públicos y privados que permitan utilizar la energía como un medio para mejorar la calidad de vida de su población. De los 9,6 millones de personas identificadas como pobres energéticos en términos de acceso y calidad, aproximadamente 768,000 no tienen acceso a electricidad, más de 5,9 millones viven en áreas donde la calidad del servicio eléctrico es deficiente y alrededor de 4,5 millones cocinan utilizando leña, carbón y desechos, lo que plantea importantes desafíos en este ámbito.