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¿Tarjeta azul en el fútbol? Gianni Infantino pone fin a la novela con tajante declaración
El presidente de la FIFA fue directo en su respuesta.
El mundo del fútbol vive cada vez más cambios en su desarrollo y en sus formas. De hecho, la tecnología venía siendo la protagonista con nuevas implementaciones que, sobre el papel, debían ayudar a un buen desarrollo del juego, como el VAR y similares. No obstante, en los últimos días empezó a tomar fuerza la implementación de la tarjeta azul.
Esta nueva forma de cartón, que se hubiese sumado a la roja (expulsión) y amarilla (amonestación) revolucionó a la prensa y a los amantes del fútbol. En sí, la propuesta consistía en que los árbitros la usaran con los jugadores que se excedieran en protestas y reclamos, sacándolos del terreno de juego durante 10 minutos.
No obstante, este sábado 2 de marzo el mismo presidente de la FIFA, Gianni Infantino, atendió a los medios y dijo que no habrá dicha tarjeta implementada, explicando de manera directa el motivo de la decisión.
“No, no habrá ninguna tarjeta azul, en ningún nivel. Es un tópico que no existe para la FIFA. No hay manera”, señaló Infantino, resaltando además que la idea de la institución es proteger la tradición del juego.
“Tarjeta roja a la tarjeta azul. Siempre estamos abiertos en IFAB y FIFA a buscar ideas o propuestas, y cada propuesta e idea tiene que ser tratada con respeto, por supuesto. Pero una vez que la miras, también hay que proteger el juego, la esencia y la tradición del juego. No habrá tarjetas azules”, sentenció el presidente de la FIFA.
"No, there will not be any blue cards"
— Sky Sports News (@SkySportsNews) March 1, 2024
Gianni Infantino rules out using blue cards in professional football 🟦 pic.twitter.com/D1r9vmqg13
Ahora bien, MARCA señaló que las pruebas de la tarjeta seguirán estando en diferentes categorías. No obstante, verla en un partido de fútbol profesional, de élite, parece estar completamente descartado por el momento.
Aunque la medida busque reducir las protestas hacia los árbitros, parece que a la FIFA, en cabeza de su presidente, no le ‘suena’ mucho la idea.