Colombia
Policía y comunidad rescatan a una bebé recién nacida abandonada en un cafetal en Riosucio, Caldas
La bebé está en perfecto estado de salud.
En un trabajo en conjunto entre la Policía y la comunidad, fue rescatada una bebé recién nacida que fue abandonada en un cafetal en la vereda Bajo San Juan, en el resguardo indígena Cañamomo y Lomaprieta, en el municipio de Riosucio, departamento de Caldas.
El conmovedor rescate se dio gracias a que varios perros del sector comenzaron a ladrar de manera insistente, por lo que los vecinos se empezaron a alertar sobre lo que los tenía tan inquietos, por lo que varios de ellos empezaron a seguir a los canes que los guiaron hasta una bebé que, según cuentan los implicados, tendría apenas dos o tres días de nacida, que fue abandonada en el cafetal metida en un bolso.
En ese momento, la comunidad dio aviso a la Policía, quienes rápidamente llegaron al lugar, donde una de las patrulleras, quien se llevó los elogios por su manera de actuar, la cargó y la empezó a calmar y a brindarle abrigo.
La recién nacida fue trasladada de manera inmediata al hospital del municipio de Supía, donde fue atendida por un equipo médico para conocer cuál era su estado de salud y descartar si había sido atacada, pero el diagnóstico, para tranquilidad de los habitantes del lugar, quienes estaban muy pendientes de la bebe, fue alentar al determinar que estaba estable.
Sin embargo, dado que tenía apenas unos pocos días de haber nacido, y había sido encontrada en el cafetal dentro de un bolso, decidieron mantenerla bajo observación médica, además porque su ombligo había sido cortado de manera inadecuada.
Los aplausos se los llevó la patrullera Yesica Andrea Guapucha, quien participó del rescate, no se ha separado de la bebé y le dio el nombre de Milagros, por la forma en la que ocurrió todo. “Cuando la encontré, supe que estaba presenciando un milagro”, dijo, y añadió: “Milagros vino al mundo para recordarnos el valor de la vida y el poder de la esperanza”.
Por lo pronto, las autoridades activaron los protocolos correspondientes por parte de la Policía Nacional, el grupo de Infancia y Adolescencia, la Comisaría de Familia, el gobernador indígena, y demás entidades competentes para identificar a la madre de la bebé y que la menor esté en las mejores condiciones.