Colombia
Invasión descontrolada de hipopótamos en el Magdalena Medio, ¿hay remedio para esta problemática?
Expertos advierten que su reproducción sin control representa una amenaza para la población y la fauna local.
El panorama no esa alentador. La problemática de la invasión descontrolada de hipopótamos en el Magdalena Medio se ha convertido ya en una grave crisis ambiental para Colombia, ante la masiva reproducción de esta especia animal, además de la poca depredación.
De acuerdo con el Ministerio de Ambiente, hoy en día se tienen registrados 169 hipopótamos, pero se estima la presencia mínima de 181. De ellos, el 28 % son adultos, el 35 % subadultos y el 37 % crías. Expertos advierten que su reproducción sin control representa una amenaza para la población y la fauna local.
De igual forma, de sabe que la territorialidad de esta especie, incrementa el riesgo de encuentros con personas y con el ganado. Además, en la comunidad de pescadores hay temor por los encuentros con los hipopótamos debido a posibles agresiones.
Ante este panorama, expertos del Instituto Humboldt, Cornare y el Instituto de Ciencias Naturales de la Universidad Nacional de Colombia, hicieron un estudio, para enfrentar esta situación, y una de sus principales conclusiones es que se debe adelantar una caza controlada en las zonas de mayor presencia de este animal invasor y salvaje.
De hecho, el Ministerio hizo públicos los puntos centrales del estudio para evitar que pueda poner en riesgo a los habitantes del Magdalena medio, en donde se encuentra asentada. Además, el ministerio aseguró que trabaja en el plan de manejo que se adoptará para esta especie en el país.
Entre los aspectos previstos para el manejo de la especie, el Ministerio destaca cinco acciones para enfrentar la situación: alertas tempranas, para informar a las comunidades sobre la presencia de la especie; intervención social, que incluye acciones de pedagogía y sensibilización; translocación, que prevé llevar a los hipopótamos a zoológicos o a poblaciones silvestres en su área natural; confinamiento, que requiere aislarlos en lugares en donde se pueda tener un número controlado de individuos, y finalmente, la caza controlada.
Sobre este último punto, advierte el ministerio que la caza solo se podrá llevar a cabo si las “circunstancias de orden social, económicas y ecológicas lo determinan” y en ningún caso será de manera masiva e indiscriminada.
La caza controlada es una medida que daría solución a la problemática en el más corto plazo y que se ejecutaría mediante disparos o conmoción cerebral. También se propone que se realice con la inyección de medicamentos, una de las medidas enfocadas en “generar impactos directos en la población de hipopótamos”, reza el informe.
El estudio también menciona la traslocación, que significa el traslado de estas especies a otros lugares del mundo, algo que ya se viene ejecutando con 70 hipopótamos, los cuales serían llevado a santuarios de fauna en India y México, en una operación que costará 3,5 millones de dólares y mitigará los estragos que causa este insólito legado del abatido capo Pablo Escobar.
Gaviria y Zazueta planean atraerlos con cebos a corrales donde permanecerán confinados antes de ser introducidos en guacales especiales para su transporte por vía aérea hacia los santuarios.
“El siguiente paso es la contratación de los aviones (y la) construcción de los guacales (...) Vamos a empezar por la India, después vamos por México”, detalló Zazueta, presidente de la Asociación de Zoológicos, Criaderos y Acuarios de México.
La meta es trasladarlos “en el primer semestre de este año”, precisó Gaviria, gobernador de Antioquia. Sin embargo, hasta el momento no se ha llevado a cabo por temas económicos y de permisos.
Otro de los puntos del estudio, hace referencia al confinamiento en un espacio donde se puedan movilizar con tranquilidad pero con restricción en el espacio en el que vivan.
También recomiendan implementar alertas tempranas, con las que se buscan hacer brigadas informativas, campañas de comunicación y ruta de reporte de interacción con estos animales en zonas donde se prevé que haya presencia. Además, sugieren ubicar señalética en sitios de alto riesgo de conflicto entre los humanos y los hipopótamos, sumado a la creación de una red de vigías para monitoreo de la especie.
Los investigadores hacen referencia a que si no hay un control de estos mamíferos, se estima que para 2035 la población supere los 1.000 y entre 2037 y 2060 sean más de 1.300. Según los registros oficiales, hay 169 hipopótamos, pero las estimaciones de los expertos indican que la cantidad está entre los 181 y los 215, siendo el 37 % crías y juveniles, 35 % subadultos y 28 % adultos.
Cabe recordar que el ministerio de Ambiente los declaró especie invasora el año pasado, abriendo la puerta a una eventual cacería. Esta decisión, basada en una resolución, cita la prohibición de la comercialización, movilización, fomento, tenencia, reproducción, propagación, con cualquier propósito, de los hipopótamos.
*Con información de Colprensa y El Colombiano