Colombia
Stefan Andrés Correa, ciudadano estadounidense que abusaba de niñas en Medellín fue capturado: revelan algunos de sus escalofriantes chats
Stefan Andrés Correa, quien desde el 2022 ingresó 45 veces a Colombia, fue capturado recientemente en Miami el pasado viernes.
A lo largo de lo que va este 2024, en Medellín se han conocido casos atroces de explotación sexual hacia mujeres menores de edad por parte de redes de trata de personas que disponen del cuerpo de las menores para ser vendidas a hombres extranjeros, la mayoría estadounidenses, quienes llegan a Colombia con el fin de cometer todo tipo de vejámenes.
Ante esto, este miércoles la revista SEMANA reveló los chats entre un ciudadano estadounidense de 42 años identificado como Stefan Andrés Correa, quien recientemente fue capturado en Miami cuando pretendía volver nuevamente a Colombia y quien confesó haber ingresado al país 45 veces desde el 2022.
El ciudadano estadounidense Stefan Andrés Correa, fue capturado el viernes pasado en el aeropuerto de Miami 🇺🇸 por las autoridades Americanas.
— Fico Gutiérrez (@FicoGutierrez) April 24, 2024
Había ingresado a Colombia en 45 oportunidades desde el 2022.
Estos abusos en contra de nuestra niñez se vienen presentando con mucha…
En uno de los apartados, el pedófilo le indica al presunto tramitador: “Para ser honesto, la p... completamente y termino dentro de ella. No quiero que ella diga “no” o “hasta donde puedes llegar”. Ella necesita entender que necesita que yo disfrute sin marcha atrás”, dice uno de los chats en poder de las autoridades.
Los apartados siguientes son más escalofriantes, ya que Correa reconoce que tiene placer con el dolor y sufrimiento de las niñas. “Lo vamos a hacer en diferentes posiciones. No quiero que me apresuren, quiero disfrutarlo y poder repetirlo, ¿entiendes? Ella no es la primera que me ha llorado. Las otras chicas se abren, me besan y lo aguantan hasta media hora. Necesito que ella entienda, si llora, voy a seguir adelante. Por favor, no interrumpas, pase lo que pase”.
Después hace referencia a los supuestos premios que le daría a las niñas que obedezcan a sus aberrantes fantasías sexuales. “¿Vale? Si todo va bien, puede ser un iPhone XS. ¿Déjame saber lo que piensas? Podemos besarnos para que ella entienda lo bueno que será. Y tal vez sea un XS Max, pero en serio, ella necesita comprender la belleza de amor y alegría”.
Obsesionado por el dolor infantil, Correa le insiste al traficante si la niña que él le conseguirá llorará durante el abuso sexual. “¿Me va a dejar llegar hasta el final o llorar y me pedirá que pare?”, a lo que el supuesto tramitador responde: “Obviamente, ella lo va a hacer”.
Y es en ese momento donde revela el precio que está dispuesto a pagar: “Ok, entonces, 300.000 para ti y 300.000 para ella y un iPhone 7 u 8 Plus”.
Estos chats, que se encuentran en poder de las autoridades, terminan con otro pedido insistente de Correa de querer generar dolor a las dos niñas. “Necesitas estar en el baño, por favor, para que haya privacidad, porque probablemente volverá a llorar del dolor. Así sabrá que no hay vuelta atrás. Ella tendrá que permitirme disfrutar y podrá intentar disfrutar ella misma. Si ella se porta bien y me cuida bien, podrás seguir trayéndola, y cada una recibirá 300k”.