¿Qué pasa si se utiliza piedra de alumbre todos los días?

Si bien es cierto, la piedra alumbre es un mineral compuesto por aluminio y potasio que, generalmente, es usado por las personas como desodorante, ya sea en forma de polvos o de piedra, por su efectividad. Además, esta piedra, de origen natural, no contiene alcohol ni perfume u otros compuestos químicos que se añaden a los desodorantes, que en muchas ocasiones pueden causar en pieles sensibles.

De hecho, la utilización continua y rutinaria de esta piedra puede lograr que se reduzca de forma considerable el nivel de sudoración y los problemas que esto conlleva. Este mineral es beneficioso para piel y se puede comprar, sobre todo, en herbolarios.

La piedra de alumbre, entretanto, es un producto eficaz para controlar la transpiración y el mal olor ocasionado por la sudoración. Según la experta en dermatología y venereología Lola Bou Camps, “hay dermatitis que aparecen por el exceso de sudor, principalmente en los pies, por eso la piedra de alumbre es beneficiosa frente a esta patología”.

Además, es un eficaz neutralizador del mal olor. Para combatir la sudoración en los pies, Camps afirma que “es recomendable el uso de la piedra de alumbre en polvo disuelto en agua y dar baños de varios minutos durante varios días seguidos, después hacer un mantenimiento de un día a la semana, principalmente en época estival”.

Sin embargo, esta no es la única propiedad con la que cuenta este mineral, se ha conocido que también ayuda como cicatrizante, pues contribuye a mejorar el proceso de cicatrización de las heridas gracias a su composición a base de aluminio y potasio. Precisamente, esta piedra tiene capacidades astringentes o estípticas, las cuales provocan sequedad en los tejidos donde se aplica. Gracias a esta propiedad actúa reduciendo la cantidad de secreciones que se puedan generar en la piel y mejorando la cicatrización.

Cuando se usa este mineral sobre la piel, además de ayudar a la cicatrización, puede favorecer a la reducción de inflamación sobre esta, es por ese motivo que se recomienda aplicarla después del afeitado o de la depilación. Esta piedra cuenta con la cualidad de calmar la piel si aparecen heridas o se irritan los poros, entretanto mejora su estado después de la depilación.

Otra de las propiedades de este mineral, según Camps, es que ayuda a mejor el acné, que es una enfermedad en la que aparecen daños en la piel por una inflamación de los poros en la misma. El uso de la piedra de alumbre puede ayudar a reducir esta inflamación, de esa forma se podrá ayudar a tratar y prevenir este problema. De acuerdo con la experta, la piedra alumbre “posee propiedades beneficiosas para diversos procesos dermatológicos, como por ejemplo lesiones provocadas por el acné”.

A propósito, según el Instituto Nacional de Salud de Estados Unidos, NIH, la piedra de alumbre ha sido estudiada por sus propiedades astringentes y su capacidad para tensar la piel. Estas propiedades podrían ser beneficiosas para reducir las arrugas y líneas de expresión, ya que promueven la contracción de los tejidos y la reducción de la apariencia de los poros.

La aplicación de la piedra de alumbre es relativamente sencilla. Aquí se describen los pasos recomendados por el Servicio Nacional de Salud del Reino Unido (NHS):

• Limpieza: Antes de aplicar la piedra de alumbre, asegúrese de que la piel esté limpia y seca. Lavar suavemente el rostro con agua tibia y un limpiador facial adecuado para el tipo de piel.
• Humedecimiento de la piedra: Humedecer ligeramente la piedra de alumbre con agua.
• Aplicación: Deslizar suavemente la piedra de alumbre sobre las áreas donde se desee reducir las arrugas, evitando el contacto directo con los ojos y los labios. Realizar movimientos circulares o ascendentes durante aproximadamente 1 minuto.
• Enjuague: Después de la aplicación, enjuagar el rostro con agua tibia para eliminar cualquier residuo de piedra de alumbre.

Es importante tener en cuenta que cada persona es diferente y los resultados pueden variar. Siempre es recomendable realizar una prueba en una pequeña área de la piel antes de utilizar la piedra de alumbre en todo el rostro.