Salud
Cuáles son las propiedades nutricionales de la avellana y por qué es necesario consumirlas
Los beneficios para la salud de las avellanas son amplios y diversos. Desde proteger contra enfermedades cardiovasculares hasta ayudar a mantener una piel joven y sana.
La avellana, más conocida como el alimento predilecto de las ardillas, no solo es un ingrediente habitual en chocolates y turrones, sino que también ofrece una amplia gama de aplicaciones culinarias y, sobre todo, beneficios para la generación de energía en el organismo.
Esta pequeña joya de la naturaleza, fruto del avellano (Corylus avellana L.), tiene un diámetro de unos dos centímetros y se caracteriza por su forma redondeada, cáscara delgada y dura, de tono canela, y su suculenta carne blanca-amarillenta de sabor dulce, envuelta por una fina capa marrón-castaña.
Originaria de China, pero ampliamente cultivada en Europa, especialmente en la cuenca mediterránea y en los países de Oriente Medio, la avellana es una fuente nutritiva.
Un bocado nutritivo
Las avellanas no solo son un bocado delicioso, sino que también son una potencia nutricional. Rico en hidratos de carbono, grasas saludables, proteínas y fibra, este fruto seco es una excelente adición a cualquier dieta equilibrada. Su lista de vitaminas y minerales es igualmente impresionante, con una abundancia de vitaminas del grupo B, vitamina E, vitamina C, vitamina K y minerales como calcio, magnesio, fósforo, potasio, manganeso, zinc, hierro y cobre.
Los beneficios para la salud de las avellanas son amplios y diversos. Desde proteger contra enfermedades cardiovasculares hasta ayudar a mantener una piel joven y sana, desde fortalecer los huesos hasta regular el sistema nervioso y cerebral, las avellanas ofrecen una amplia gama de ventajas para el organismo.
Además, el consumo regular de avellanas puede proporcionar una energía vital, fortaleciendo el cuerpo y ayudando a combatir la fatiga. Su alto contenido de fibra las hace ideales para mejorar la digestión y prevenir el estreñimiento, y su equilibrio de calcio y fósforo las convierte en una opción perfecta para promover el crecimiento en la adolescencia y mantener la salud ósea en la vejez.
En resumen, las avellanas no son solo un placer para el paladar, sino también un aliado invaluable para una vida saludable y llena de vitalidad. Incorporar este fruto seco en la dieta regularmente puede marcar una diferencia significativa en la salud y el bienestar general.
Las avellanas no solo son un excelente aperitivo por sí solas, sino que también pueden ser un complemento delicioso en una variedad de platos y recetas. Aquí hay algunas formas creativas de incorporarlas en tu día a día:
- Desayuno energético. Añade avellanas a tu desayuno mezclándolas con yogur, cereales o frutas frescas. Esta combinación no solo proporciona un impulso de energía por la mañana, sino que también agrega una deliciosa textura y sabor.
- Las avellanas son un ingrediente versátil que puede realzar una variedad de platos. Agrégalas a salsas, ensaladas, sopas, verduras salteadas, arroces, guisos e incluso úsalas como espesante para tus recetas favoritas.
- Para aprovechar al máximo los beneficios nutricionales de las avellanas, es recomendable comprarlas crudas y remojarlas durante la noche para eliminar los antinutrientes como el ácido fítico.
- Al consumir alimentos concentrados como los frutos secos y las semillas, es importante equilibrarlos con una ensalada fresca de verduras. El agua de las verduras compensa la falta de agua en los frutos secos y las semillas, proporcionando una combinación nutritiva y saciante.
- Para mantener las avellanas frescas y crujientes, es fundamental almacenarlas correctamente. Guárdalas en recipientes herméticos en un lugar fresco y seco, lejos de la humedad. Si están con cáscara, se conservarán por más tiempo, pero si están peladas, pueden durar hasta 3-4 meses en el refrigerador o hasta un año en el congelador.