Lo hacemos de corazón

En Constructora Solanillas nos caracterizamos por hacer las cosas de corazón. Como parte de nuestra identidad corporativa propendemos siempre poner amor en cada uno de nuestros proyectos como reflejo de lo que llevamos en el corazón.

Y es que detrás de cada negocio que realizamos residen los seres humanos que se encargan de hacer los sueños, sus sueños, realidad. Entre ellos encontramos colaboradores que componen nuestros equipos de trabajo, directivos, proveedores, clientes y compañías aliadas que nos inspiran a diario para seguir construyendo juntos un futuro que funcione para todos.

Te presentamos a continuación algunos integrantes de la Familia Solanillas, a quienes, como compañía, de corazón les agradecemos por darle vida a nuestro hogar y, con eso, a de miles de familias, gracias por construir junto a nosotros.

Erika tiene 44 años, es contadora y trabaja en Constructora Solanillas desde hace 10 años. Junto a Solanillas ha construido muchos sueños como: formarse a nivel profesional, adquirir vivienda propia, viajar y brindar bienestar a su familia.

“A mí me gusta Solanillas”

Como distintivo, Erika resalta la posibilidad que se tiene al interior de la compañía de crecer a nivel laboral, pero sobre todo la familiaridad, la unión y la pasión que nos caracteriza. Ella se siente en familia y es por eso que le gusta Solanillas.

Jhorman tiene 35 años, nació en Venezuela y tiene 3 hijos. Hace cuatro años llegó al país y después de ejercer diferentes labores, se sumó a la historia de Solanillas a través de un trabajo temporal en el área de mercadeo, en respuesta al buen desempeño y amabilidad que lo caracteriza en poco tiempo fue contratado como trabajador de obra indirecto y posteriormente directo como ayudante de obra. Hoy, después de casi 3 años se capacitó, certificó y actualmente desempeña la labor de Operador de Maquinaria.

Para Jhorman es un orgullo hacer parte de esta familia y, a pesar de que extraña su amado país, dice que espera poder seguir construyendo su historia y la de su familia junto a nosotros.

Marly tiene 40 años, una hija de 21 y trabaja prestando servicio de alimentación al personal en uno de los casinos de nuestras obras en Jamundí.

Se dedica a esta labor desde hace 13 años aproximadamente, oficio que desempeña con gran orgullo siendo inspiración para muchas mujeres que como amas de casa desean tener su propio negocio. Hoy, gracias a su casino, no solo provee una alimentación de gran calidad, sino que también da trabajo a 7 colaboradoras más.

Agradece a Constructora Solanillas y en especial al personal de la obra en la que trabaja por el apoyo brindado a diario y espera poder continuar creciendo junto a nosotros.

“Es un camino que he recorrido paso a paso y espero estar muchos años acá”