“Lo que expresamos nada tiene que ver con nuestra cultura”, Andrés Mesa integrante de Cali Flow Latino

Cali Flow Latino está lanzando Fiesta, sencillo que hace parte de su nuevo álbum musical, Auténtico. Pero en medio de la promoción, ha sido blanco de la polémica por su declaración a una emisora radial en la que aseguró que “Bogotá debería ser la Capital Mundial de la Salsa”.

Andrés Mesa, intérprete del famoso éxito Ras Tas Tas, asegura que “Cali está sentida por esas declaraciones, pero quiero que sepan que es un llamado de atención a los periodistas, a la opinión pública, al gobierno, para visibilizarnos y manifestar nuestro descontento, porque estamos siendo atropellados artísticamente”.

El cantante aprovechó para extender sus excusas a la comunidad salsera, y reiteró a la cultura de la ciudad “lo que expresamos nada tiene que ver con nuestra cultura, con la fiesta, la rumba o la identidad salsera de Cali, eso nadie se los quita y menos nosotros que la hemos fomentado, mostrando bailarines y bailadores en su gran expresión y queremos seguir haciéndolo”. Lea también: El espectáculo nocturno que puede disfrutar en su visita a Cali; conozca los detalles

El también gerente de Cali Flow Latino, cuenta que la Secretaría de Cultura y la Alcaldía de Cali les solicitaron una propuesta musical para que participaran en la COP 16, “pero cuando presento la propuesta, me dicen ‘Andrés, esa propuesta suya está muy alta, ¿por qué me estás cobrando tanto, si hace un año me cobrabas esto y ahorita te estás elevando’. Además, ustedes son artistas del distrito de Aguablanca’. ¿Te imaginas por lo que tenemos que pasar los artistas?”.

Al interrogar a los también intérpretes de Full HD, Bugalú y Swagga, sobre la cifra que cobran por show, aseguraron que un concierto suyo cuesta más de $45 millones.

Precisamente, mientras la propuesta de la COP 16 se desintegraba, la agrupación también estaba haciendo negociaciones con el Festival Salsa al Parque, que tuvo lugar recientemente en Bogotá, a quienes les presentaron la misma propuesta por el mismo valor, y se las aceptaron sin ningún ‘pero’.

“Yo entiendo a muchos caleños que tal vez se sintieron dolidos por nosotros poner en duda el título de Capital Mundial de la Salsa, pero es que esto va más allá, es que este complejo salsero tiene muchos sectores que están abandonados y créanme que el letrero le está quedando grande a la Administración, a todos estos empresarios que lo único que hacen es traer gente de afuera y descuidan a sus artistas. Esto que nos pasó me puso a hacer comparaciones: ¿Cómo así que yo estoy en mi ciudad, Cali, donde no me están valorando, me están pisoteando toda la trayectoria, el arte de una agrupación que ha hecho hasta lo imposible por mostrar la diversidad cultural de Cali? Porque nuestra ciudad no es solamente rumba, Calle de la Salsa, son sus bailarines, pero nos sentimos excluidos, al igual que ellos, hoy por hoy tampoco nos han pagado presentaciones de Ferias de Cali anteriores”, anota.

Recalca que en Bogotá, en la misma entrevista radial, él afirmó que se sentían increíble por la gran acogida, aun en medio de un copioso aguacero acudieron a verlos más de 150.000 personas en el parque Simón Bolívar. Y recibieron todas las atenciones por parte de los organizadores.

“En Cali han sido muchos los desplantes por los que hemos pasado como artistas. Cuántas injusticias han cometido contra la comunidad salsera —bailarines, bailadores, melómanos— que no son bien valorados por administraciones, contratistas, empresarios. Así que por eso dije que Bogotá podría ser la Capital Mundial de la Salsa, porque el apoyo que dan a sus artistas es muy grande. Pero sacaron la entrevista de contexto, editan lo que les conviene”.

Por su parte, Harry Mesa, también integrante de la agrupación, coincide en que “esta situación nos ha venido golpeando durante mucho tiempo, así que yo creo que ya era el momento de alzar la voz, aunque siempre va a haber alguien que pague los platos rotos y nosotros nos arriesgamos a eso. Pero después de la tormenta, viene la calma. No estamos esperanzados en que Cali nos contrate, no estamos esperanzados en que los gobiernos nos contraten. Nosotros mismos hemos entendido labrar el camino”.

Y aclara Harry: “Nosotros en Cali no tocamos, no porque no queramos ramos, sino que porque por fuera, las contrataciones son distintas, las garantías son mejores”.

Por otra parte, cuentan que Fiesta hace parte de Auténtico, su nuevo álbum, del que Andrés Mesa es el productor, “hicimos una pausa de casi dos años para volver a lanzar algo, para estudiar el mercado y proponer algo muy evolucionado, que tendrá desde rock and roll, un poco de cumbia y dembow dominicano”.

Están enfocados en impulsar una puesta en escena y el baile en los videos, tal como lo mostrarán en vivo, con efectos, músicos y color.

Dicen que aparte de la realización de su producción, están grabando en Miami una miniserie, en la que contarán su historia, que arrancó en el año 2000, en un principio se dedicaban a la producción audiovisual, haciendo una labor social con los jóvenes en el distrito de Aguablanca, haciéndoles videos musicales sin costo. A partir de Ras Tas Tas, la historia fue otra.

Y es la que quieren contar “como un ejemplo de que los jóvenes que venimos de abajo sí podemos vivir de la música”.

Lo que sigue es internacionalizarse: “en Cali ya dimos a conocer nuestra cultura, ahora la vamos a llevar a otros países”, concluye Andrés, y de paso aclara que seguirán llamándose Cali Flow Latino, pese a que por su mensaje, para muchos equívoco, algunos les han pedido llamarse: Bogoflow.